Cortar todas las verduras al sesgo o en cubos ni muy grandes ni muy chicos.
Calentar el wok.
Agregar un chorro de aceite (puede ser de oliva, girasol, maíz, lino, coco)
Incorporar el jengibre cortado en láminas finas.
Saltear unos minutos y agregar todos los vegetales.
Saltear hasta que estén cocidos.
En un bol mezclar la leche de coco, la sal, la pimienta y el curry en polvo.
Minutos antes de servir, incorporar esta mezcla al wok.
Saltear unos minutos hasta que se forme la salsita por reducción de la leche de coco.
Servir con una cucharada de arroz blanco y espolvorear con cilantro picado.