Tamizar los polvos y colocarlos en un bol.
Por otro lado mezclar el aceite de coco (semi sólido) con la aquafaba, la ralladura, el extracto de vainilla y el jugo de zanahoria.
Integrar los líquidos a los polvos y formar una masa. Si fuera necesario, agregar un chorrito de leche o agua.
Estirar con palote hasta lograr 3 o 4 ml de espesor.
Cortar las tapitas del tamaño deseado y llevar a horno, a temperatura moderada a baja, por unos 10 minutos. Siempre depende del grosor que tengan las tapas, pero por lo general se cocinan muy rápido. HAY QUE SACARLAS ANTES DE QUE SE DOREN!
Untar con dulce de leche y pasar por coco rallado.
Lo ideal es conservarlos en la heladera y sacarlos unos minutos antes de consumirlos. Son MUCHO, pero MUCHO más ricos cuando descansan TODO un día, pero, a veces no llegan!!!