Ésta es una picada vegana y sí se ve igual a la especista. ¿Por qué? Lo dijimos mil y una veces, pero va una vez más: no nos hicimos veganas porque nos dejó de gustar el jamón -digo jamón por poner un ejemplo, porque vale para el salame, el queso y cualquier fiambre, carne, lácteo, etc.-. Nos hicimos veganas porque una vez que comprendimos de dónde viene el jamón y todo el sufrimiento y muertes que implica que llegue a nuestra tabla, no pudimos volver a comerlo.
Y con comprender me refiero a realmente hacernos cargo de algo que ya sabíamos bien. «Eso no es jamón», decíamos cuando alguien nos ofrecía una feta de fiambre rosado perfectamente cuadrada. «El jamón es la pata del cerdo y los cerdos no tienen patas cuadradas», lanzábamos con cierta soberbia sibarita y completa carencia de empatía, sabíamos una parte y desconocíamos -elegíamos no mirar- la otra.
EL JAMÓN
Para que el jamón sea jamón primero nacerá un cerdo, seguramente en cautiverio y será alejado de su mamá. Porque, aunque la leche de cerda no se tome como la de vaca, a los cerditos suelen ponerlos apartados de su mamá y solo pueden acercarse a ella para mamar. Probablemente después crecerá en un ambiente cerrado, lejos del sol y de la tierra y comiendo granos para engordar lo más pronto y mejor posible. Si es un poco afortunado, zafará de que le pongan un aro en su hocico para impedir que olisquee. Aunque, lamentablemente, seguro no corra la misma suerte con la etiqueta numerada que a la mayoría les prenden de la oreja para entender cuál es cuál, porque quién es quién está dificil cuando a los animales se los cosifica. Y si no muere antes por alguna peste o infección producto de alguna riña, tendrá la fortuna de sufrir todavía un poco más al ser llevado al matadero que acabará con su vida. Y ahí, quién sabe, quizás tenga suerte y sea asesinado de manera «piadosa».
Y acá déjenme hacer una pausa, porque cada vez que digo «muerte humanitaria» (o piadosa o como quieran llamarle, más allá de lo contradictoria que me suena la frase) se me representa mentalmente una imagen (no recuerdo bien si es de Cowspiracy o Earthlings, solo se que lloré a mares cuando la vi) donde se muestra la «muerte humanitaria» en un matadero de cerdos. Al cerdo lo obligan a ingresar a un cubículo todo como de acero inoxidable. Una vez dentro el animal, lo cierran herméticamente y las paredes se empiezan a encoger. El cerdo grita, ruega en alaridos, mientras es aplastado hasta la muerte. Esa aberración es lo que llaman «muerte humanitaria».
Una vez muerto el cerdo, será jamón, panceta, salamín o longaniza. Será chorizo, pechito de cerdo, costillitas. Y todos olvidarán lo que fue y lo que requirió que llegara hasta sus mesas, porque «oh ¡es tan rico!».
El problema es que miramos diferentes caras de una misma moneda. Mientras mucha gente se preocupa porque imitamos la comida «animal», a nosotras lo que nos preocupa es que los animales sean «comida». Mientras mucha gente se enfurece porque en Yulin, pese a las prohibiciones, se realizó el festival de carne de perro, a nosotras nos enfurece que sean capaces de ver la crueldad con los perros en China, mientras se engullen una tabla de fiambres.
Sí, esta es una PICADA VEGANA. Acá el queso está hecho con semillas de girasol o con lupines y también está este otro de castañas de cajú de CRUDDA. Acá el jamón es de gluten de trigo y la longaniza estacionada a base de tomate, se las enseñaremos a preparar en estos días. «Pero, ¿el sabor es el mismo?», preguntan. Y no, claro que no sabe igual, SABE MEJOR porque no tiene todo ese horror de sufrimiento y muerte en medio, y aún si éste fuera el jamón vegano más desabrido del planeta, al menos no dejará ese sabor amargo en la boca, ni en el corazón.
Emanuel gomez dice
Hola soy cocinero. Trabajo en un restaurante
Por cuestión médica me hice vegano. Compré sus libros y estoy haciendo un listado de recetas. Estoy aprendiendo cocina de nuevo.
Estoy planeando un resto hace mucho con mi pareja. Y hoy dimos vuelta el proyecto. Y no por covid19 sino hacias un resto vegano y orgánico. Sabemos de desafíos y este será el plato fuerte…
Se aceptan consejos…
Y chicas gracias.
Vamos con el número tres…
maruraffaelli dice
Emanuel! Qué bueno todo lo que contás. Espectacular ese proyecto! Vamos siempre por más!
Jesica dice
Me emocioné leyendo su reseña, solo eso! Gracias por acercarnos comida rica, saludable y sin sufrimiento animal!
maruraffaelli dice
Gracias por leer y comentar! Abrazo!
Gri dice
Hola chicas!
Estoy haciendo el gran esfuerzo de desconstruir mí alimentación. Me súper motiva su blog. Así que gracias, espero no aflojar y seguir por este camino que es la única salida a la crueldad animal y a un planeta más limpio.
Gracias!
maruraffaelli dice
Qué bueno! Tenete paciencia y no te castigues si aflojás en algún momento. Lo clave es no perder el objetivo. Abrazo!
Lucía dice
La pinta que tiene esta picada! y lo mejor, sin crueldad animal.
Jimena dice
Hola!!!
Por alguna razón me acabo de cruzar con ustedes…
Hace una semana que mi alimentación es a base de plantas
Es un momento en el que los que podemos, agradecemos y somos más conscientes de lo que sucede a nuestro alrededor…
Las tendré en cuenta para alimentarme con mucho amor
Gracias Totales!
Ornella dice
Hola, buenas tardes!! Gracias por compartir esta info tan valiosa y útil para todes. Gracias!!!
Quería preguntarles qué son los lupines ya que quiero hacer el queso pero vivo en Brasil y no sé cómo buscarlos.
Muchas gracias!!!