CHUPETÍN TIPO TATÍN

Recuerdo muy bien la primera vez que me dejaron ir sola al kiosko de la vuelta de casa. En ese momento vivíamos sobre una calle de tierra y eran épocas en las que todavía los niños jugábamos en las veredas. No recuerdo qué fue lo que compré ese día pero si estar repitiendo todo el tiempo en mi cabeza qué era lo que tenía que pedir, estando atenta a las cosas que pasaban en la calle y apurada para no tardar demasiado y que mamá no se preocupara.

Seguramente compré un chupetín Tatín, ¿alguien lo recuerda? Era semi-duro con sabor a dulce de leche y tenía maní. Sin dudas, era una de mis golosinas favoritas. De textura suave, dulce y masticable. De esas golosinas que te dejan ardiendo la garganta de tan dulces que son.

Parecido a este que les traigo hoy… bah, como éste pero sin toooooodo eso que no queremos que consuman nuestras criaturas hoy. Tal vez porque hay más información, tal vez porque los mapadres de ahora estamos un poquito más atentos y más despiertos y tal vez porque siento que como veganas que somos estas tres hermanas tenemos una misión o, mejor dicho, dos: 

1.  VEGANIZAR TODO LO QUE ESTÉ A NUESTRO ALCANCE 

2.  QUE EL MUNDO SEPA QUE SER VEGAN NO IMPIDE QUE PUEDAS COMER LO QUE MÁS TE GUSTE

Inspirada en los Tatín, a algunos les puse Maní King (ja, me salió un versito!).

Cuando se me ocurrió preparar esta receta me di cuenta de que no tenía moldes para chupetines. Pensé en pedirlos por internet y hacerla otro día, pero soy bastante ansiosa y sabía que no iba a poder esperar. Me rompí el coco pensando en qué usar como molde y bueno, acá está la prueba de que pude resolverlo en el momento. 

También se me ocurrió envolverlos en papel metálico para su mejor conservación y pensé en que sería una buena opción prepararlos en el próximo cumpleaños de Roma, para armar algunas bolsitas con golosinas veganas y caseras! A ella le encantaron -eso que no es fanática de las cosas dulces-.

Cuando los estaba preparando, recordé que con Marula, siendo adolescentes, siempre comíamos unos chupetines de dulce de leche con forma de bolita y súper duros. Los comprabamos en el kiosko que quedaba frente a nuestro colegio justo antes de entrar.

Si quisieran hacer esa versión deben agregar a la receta algún tipo de jarabe que contenga glucosa, como jarabe de maíz y obviamente omitir el maní. 

Recuerden que, si no consiguen los ingredientes hechos o prefieren hacerlo todo ustedes, acá tenemos receta para la leche de almendras y el dulce de leche repostero.

Y si no tienen ni quieren hacer los moldes, pueden usar cualquier molde siliconado de muffins o budín y luego cortar la preparación en pequeños cuadraditos, cual caramelos!